La guarda y custodia compartida es cuando ambos padres comparten la responsabilidad de cuidar y criar a sus hijos de manera equitativa. Esto significa que los niños pasarán tiempo con ambos padres de forma regular y que ambos padres tomarán decisiones importantes sobre su educación, salud y bienestar.

Por otro lado, la custodia exclusiva es cuando uno de los padres tiene la responsabilidad principal de cuidar y criar a los hijos, y el otro padre tiene derechos de visita limitados o supervisados. En este caso, el padre custodio tiene el derecho de tomar decisiones importantes sobre los hijos sin tener que consultar al otro padre.

En resumen, la principal diferencia entre la guarda y custodia compartida y la custodia exclusiva es el grado de responsabilidad y toma de decisiones que tienen ambos padres. Con la guarda y custodia compartida, ambos padres comparten la responsabilidad y toman decisiones juntos, mientras que con la custodia exclusiva, uno de los padres tiene la responsabilidad principal y toma decisiones sin consultar al otro padre en muchos casos.